Go shopping!

¡Hola Ricuras!

Calmaaaaaaaaaaa que no cunda el pánico que no vengo con un especial "Back to school" o "que es lo que vamos a llevar la próxima temporada" o similares. No, no, no... acabo la semana de holidays, mes y verano con las tres tiendas más bonitas que he visto en Morella.

Una, de minerales, otra de productos naturales: lavanda, espliego, te de roca... en aceites, velas, geles, colonias... y por último, una alpargatería que hizo las delicias de Óscar.

¿Pinta bien verdad?

Pues vamos allá!

Los que os reenganchéis al blog ahora os diré que el tercer fin de semana de cada seis años, Morella tira el pueblo por la ventana. Celebra el Sexenni y este año tocó el 54 y que yo lo descubriera. 

No se como agradecer a mi hermana y su chico que me cogieran de la oreja y me llevarán a verlo. Maravillosa la experiencia es decir poco. Porque si ya de por si, ver el pueblo así decorado es un regalo para los sentidos (vosotros veis las fotos, pero no os imagináis lo bien que olía el pueblo y lo que supuso tocar y ver que los murales eran de papel de seda. ¡Que paliza hacerlos!), pues bien poder charlar con los tenderos, con la alpargatera de toda la vida, con el que coge el espliego y lo macera... es todo un honor. 

   

Y así os vengo a presentar mi primer flechazo, Yeste fosiles y minerales.

Debería ser el punto 20 de "sitios de interés turísticos de Morella" que se sitúa en el mapa a la entrada del pueblo; y es que es increíble la cantidad de historia que alberga tras esa fachada de piedra. Su planta superior, es un museo arqueológico con piezas tan maravillosas como esta y con un pozo, que, si te atreves a mirar no dejas de pensar el ¿y esto hasta donde llegará? 

Pero no solo de fósiles se nutre Yeste, sino que tiene una extensa colección de minerales y de bisutería. La planta baja es el paraíso de las fashionistas que, como yo, les vuela el tiempo probándose anillos, pulseras y collares. Y cayo una, ¡claro que si! Os he ido subiendo todo el verano mi muñeca decorada con piezas que voy comprando en cada sitio turístico y esta de abajo se une a la colección.

Y siguiendo caminando por sus decoradas calles...

 Encontramos una tienda que haría las delicias de cualquier BeautyBlogger. Sus productos naturales tenían una cola que salía de la tienda. Lavanda, espliego, te de roca en todas las formas y versiones imaginables. 

Caí con e te de roca y puedo decir que riquísimo. Como contra, no os imagináis lo que me arrepiento de no haber picado con alguna de sus esencias de lavanda pero estaba tan agotada que más peso en el capazo  era una condena.

Y yo iba agotada con el capazo y agobiada con el calorazo que hacía, pero no os podéis imaginar la carica de Óscar cada vez que pasábamos por una alpargatería. Se que con sus hernias iba sufriendo de lo lindo con las sandalias que llevaba, así que como buena compradora de calzado se que el truki es cambiar de modelo para seguir tirando millas y le regale estas de estilo navy queeeeeeeeeeeee ojala hubieran habido para mi. 

Y me despido con el reloj solar de Morella. Lástima que el tiempo corra tan rápido cuando estas disfrutando de lo lindo, pero estoy convencida que dentro de poco, fuera de las fiestas y con la idea de vivir la tranquilidad del pueblo, volveremos.

Besitos,

Su